MELISSA INES PADILLA LOPEZ
YESICA PAOLA ROJAS CASTILLO
miércoles, 21 de mayo de 2025
reflexión a partir de las preguntas dinamizadora:
BITACORA
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Referencias Bibliográficas
Krauskopf, D. (1995). El desarrollo psicológico en la adolescencia. Revista de Ciencias Sociales, (69), 9-26. Recuperado de SciELO: http://www.scielo.sa.cr/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1409-41851999000200004
Pro Sciences: Revista De Producción, Ciencias E Investigación. (2022). Desarrollo psicológico del adolescente: una revisión sistemática, 6(42), 389–398. https://doi.org/10.29018/issn.2588-1000vol6iss42.2022pp389-398
Sociedad Española de Medicina de la Adolescencia (SEMA). (s.f.). Desarrollo durante la adolescencia. Aspectos físicos, psicológicos y sociales. Recuperado de https://www.adolescenciasema.org/ficheros/PEDIATRIA%20INTEGRAL/Desarrollo%20durante%20la%20Adolescencia.pdf
Piñero, M. (2004). Crecimiento y comportamiento en la adolescencia. Revista de Psiquiatría y Salud Mental, 21(2). Recuperado de http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0211-57352004000200005
Psicología y Mente. (2024). Psicología del Desarrollo: principales teorías y autores. Recuperado de https://psicologiaymente.com/desarrollo/psicologia-desarrollo-teorias
Acontecimientos evolutivos en la adolescencia
Los acontecimientos evolutivos en la adolescencia son los cambios físicos, emocionales, mentales y sociales que ocurren durante esta etapa del desarrollo humano. Estos procesos forman parte del crecimiento natural y ayudan al adolescente a construir su identidad, desarrollar autonomía y prepararse para la vida adulta.
De la infancia a la adolescencia😍
La transición de la infancia a la adolescencia es una etapa compleja, marcada por cambios profundos a nivel físico, emocional, social y psicológico. Esta transformación no solo modifica el cuerpo del niño en su camino hacia la adultez, sino que también plantea retos importantes en la construcción de la identidad y el manejo de nuevas emociones.
podcasts https://youtu.be/_Sme1GprGmc?feature=shared
Como comparte Omaira Guzmán, vivir esta etapa junto a sus hijas ha sido una experiencia enriquecedora y desafiante. En su testimonio destaca cómo el cuerpo adolescente se transforma aceleradamente: aparecen los caracteres sexuales secundarios, cambia la voz y se modifica la contextura física. Sin embargo, estos cambios externos van acompañados de un despertar emocional y una búsqueda intensa de identidad y pertenencia.
Según Stassen (2016), en esta etapa los adolescentes atraviesan una fase de exploración que influye directamente en su autoestima. La presión social sobre la imagen corporal y los roles de género puede impactar negativamente su seguridad y bienestar emocional, especialmente cuando estas expectativas provienen del entorno escolar, las redes sociales o incluso del ámbito familiar.
Desde la teoría del desarrollo, Freud describe este momento como la “fase genital”, donde la energía psíquica se orienta hacia relaciones afectivas más maduras. Si estas experiencias se ven reprimidas o juzgadas, pueden surgir conflictos internos importantes. Por su parte, Erikson plantea que el gran reto de la adolescencia es la construcción de la identidad, lo cual requiere un entorno que permita la exploración libre y sin juicio.
Por ello, comprender los acontecimientos evolutivos en esta etapa es esencial para padres, educadores y la sociedad en general. Como destaca Guzmán, acompañar al adolescente con empatía, validando sus emociones y ofreciéndoles un espacio seguro para expresarse, es clave para su desarrollo integral.
La adolescencia no debe ser vista solo como una etapa difícil, sino como una oportunidad para guiar con respeto, escuchar sin imponer y construir entornos más humanos y comprensivos. Porque crecer no debería doler, sino ser un proceso acompañado, respetado y amoroso.
De la infancia a la adolescencia: una transformación profunda 
El paso de la infancia a la adolescencia representa una de las transiciones más significativas en la vida del ser humano. No se trata solo de un cambio físico evidente, sino de una transformación integral que abarca el cuerpo, las emociones, la mente y las relaciones sociales.
Durante esta etapa, los niños comienzan a dejar atrás la ingenuidad de la niñez para enfrentarse a una realidad más compleja: su cuerpo cambia, aparecen nuevas responsabilidades y surge una necesidad intensa de construir una identidad propia. Este proceso puede generar confusión, inseguridad y muchos interrogantes, tanto para los adolescentes como para quienes los rodean.
Comprender esta transición desde una mirada humana y teórica es esencial. Significa reconocer que cada adolescente vive su propio proceso, con ritmos y emociones distintas, y que el acompañamiento respetuoso de padres, docentes y adultos significativos puede marcar una gran diferencia.La adolescencia no es solo un período de cambios, sino también una oportunidad para crecer, descubrir y aprender. Acompañar esta etapa con empatía, sin imponer ni juzgar, es una forma de contribuir al bienestar emocional y social de las nuevas generaciones. 
¿Qué es ser adolescente?
La adolescencia es una etapa clave en el desarrollo humano. Es un periodo de transición entre la infancia y la adultez, en el que ocurren profundos cambios físicos, emocionales, cognitivos y sociales. Es una etapa de búsqueda: buscamos respuestas, nos cuestionamos, y queremos pertenecer. Nos preguntamos:
¿Quién soy? ¿Qué creo? ¿Qué quiero ser? ¿Dónde encajo?
Durante este proceso, comienzan a formarse distintas áreas de la identidad, y las relaciones que establecemos, tanto con adultos como con nuestros pares, juegan un papel crucial en esta construcción.
Socialización primaria y secundaria
La socialización primaria ocurre en el entorno familiar. Desde pequeños aprendemos valores, normas, creencias y formas de ver el mundo. En la adolescencia, esos aprendizajes se reevalúan. Comenzamos a cuestionar lo que nos han enseñado y, muchas veces, nos alejamos de esas ideas para encontrar otras con las que nos sintamos identificados.
Luego aparece la socialización secundaria, que se da en contextos más amplios como la escuela, las redes sociales, grupos deportivos, culturales o espirituales. En esta etapa, el adolescente se expone a nuevas experiencias y puntos de vista que enriquecen o desafían lo aprendido en casa. Esta fase es fundamental para la formación de la identidad vocacional, religiosa y sexual.
Identidad religiosa, vocacional y sexual
Durante la adolescencia, la identidad se va definiendo en distintos aspectos:
• Identidad religiosa: A menudo, la religión se hereda del entorno familiar. Sin embargo, muchos adolescentes comienzan a cuestionarla y buscan una espiritualidad que les represente auténticamente. Algunos optan por nuevas creencias, otros se alejan de la religión y algunos simplemente se toman el tiempo para explorar.
• Identidad vocacional: Surge el deseo de descubrir una vocación, una carrera o propósito de vida. La adolescencia es el momento de soñar, pero también de enfrentar las limitaciones sociales o económicas. Por eso es importante que existan espacios de orientación vocacional, acompañamiento docente y experiencias prácticas que permitan al adolescente conocerse mejor y tomar decisiones informadas.
• Identidad sexual: Es un componente clave del ser humano. Aquí se explora la orientación sexual, la identidad de género y la expresión del propio cuerpo. Este proceso, aunque natural, puede verse afectado si no hay un entorno de respeto, información clara y acompañamiento emocional. El rechazo familiar o social puede provocar inseguridad y afectar el bienestar psicológico del adolescente.
Relaciones con los adultos y con los padres
Las relaciones con adultos —como padres, docentes, líderes comunitarios o figuras de autoridad— pueden ser complejas. El adolescente necesita independencia, pero también orientación. Cuando se les escucha y se les guía con respeto, estas relaciones contribuyen positivamente a su desarrollo social, vocacional y afectivo.
Por otro lado, las relaciones con los pares se vuelven esenciales. Los amigos son el espacio de validación emocional. Con ellos se comparten dudas, creencias, experiencias, miedos y descubrimientos. Sentirse parte de un grupo fortalece la autoestima y ayuda a enfrentar momentos de rechazo o incomprensión en otros espacios, como el familiar.
1. Uso y abuso de drogas
2. Embarazo antes de los 16 años
El embarazo precoz puede truncar proyectos de vida, generar abandono escolar y traer consecuencias físicas, emocionales y sociales tanto para la madre adolescente como para el bebé. La falta de educación sexual, la ausencia de comunicación en el hogar y la desinformación son causas comunes. Es esencial promover una sexualidad responsable basada en el conocimiento, el respeto y el autocuidado.
Durante esta etapa, los niños comienzan a dejar atrás la ingenuidad de la niñez para enfrentarse a una realidad más compleja: su cuerpo cambia, aparecen nuevas responsabilidades y surge una necesidad intensa de construir una identidad propia. Este proceso puede generar confusión, inseguridad y muchos interrogantes, tanto para los adolescentes como para quienes los rodean.
Comprender esta transición desde una mirada humana y teórica es esencial. Significa reconocer que cada adolescente vive su propio proceso, con ritmos y emociones distintas, y que el acompañamiento respetuoso de padres, docentes y adultos significativos puede marcar una gran diferencia.La adolescencia no es solo un período de cambios, sino también una oportunidad para crecer, descubrir y aprender. Acompañar esta etapa con empatía, sin imponer ni juzgar, es una forma de contribuir al bienestar emocional y social de las nuevas generaciones.
Desarrollo cognitivo en la adolescencia💬
El desarrollo cognitivo durante la adolescencia representa un cambio profundo en la forma en que los jóvenes piensan, toman decisiones y comprenden el mundo que los rodea. No se trata solo de adquirir nuevos conocimientos, sino de transformar la manera en que se procesan las ideas, se analizan las situaciones y se enfrentan los desafíos diarios.
Según Piaget, en esta etapa aparece el pensamiento operacional formal, que permite a los adolescentes razonar de forma abstracta, formular hipótesis, pensar en el futuro y considerar múltiples posibilidades ante una situación. Sin embargo, este avance intelectual no siempre se traduce en decisiones racionales. Los adolescentes aún están en un proceso de maduración cerebral, donde coexisten dos formas de pensar: una intuitiva y rápida, basada en emociones e impulsos, y otra analítica y lógica, que requiere mayor reflexión. A este fenómeno se le conoce como procesamiento dual.
Uno de los aspectos más característicos del pensamiento adolescente es el egocentrismo cognitivo, el cual puede manifestarse de tres formas:
1. Audiencia imaginaria: el adolescente siente que está constantemente bajo la mirada y juicio de los demás, lo que puede generar ansiedad, necesidad de aprobación y cambios en su conducta.
2. Fábula personal: creen que sus experiencias son únicas y que nadie más podría entender lo que sienten, lo que los lleva a aislarse emocionalmente.
3. Vulnerabilidad imaginaria: piensan que son invencibles, lo cual puede llevarlos a asumir riesgos innecesarios, como conductas imprudentes o desafiantes.
Estas creencias, aunque normales en el proceso de crecimiento, pueden influir negativamente en las relaciones familiares, escolares y sociales. Por ejemplo, pueden rechazar consejos de los adultos, seguir conductas de grupo por presión social o minimizar los riesgos de ciertas decisiones.
Comprender cómo piensan los adolescentes no solo permite prevenir comportamientos de riesgo, sino que también mejora la comunicación con ellos. Cuando padres, docentes y cuidadores comprenden estos procesos cognitivos, están en mejor posición para apoyar a los jóvenes en su desarrollo emocional y social.
Uno de los aspectos más característicos del pensamiento adolescente es el egocentrismo cognitivo, el cual puede manifestarse de tres formas:
1. Audiencia imaginaria: el adolescente siente que está constantemente bajo la mirada y juicio de los demás, lo que puede generar ansiedad, necesidad de aprobación y cambios en su conducta.
2. Fábula personal: creen que sus experiencias son únicas y que nadie más podría entender lo que sienten, lo que los lleva a aislarse emocionalmente.
3. Vulnerabilidad imaginaria: piensan que son invencibles, lo cual puede llevarlos a asumir riesgos innecesarios, como conductas imprudentes o desafiantes.
Estas creencias, aunque normales en el proceso de crecimiento, pueden influir negativamente en las relaciones familiares, escolares y sociales. Por ejemplo, pueden rechazar consejos de los adultos, seguir conductas de grupo por presión social o minimizar los riesgos de ciertas decisiones.
Comprender cómo piensan los adolescentes no solo permite prevenir comportamientos de riesgo, sino que también mejora la comunicación con ellos. Cuando padres, docentes y cuidadores comprenden estos procesos cognitivos, están en mejor posición para apoyar a los jóvenes en su desarrollo emocional y social.
podcasts Yesica Rojas https://youtu.be/DmdEynN3tqo?si=Ffp2m6eOEy47zfaH
El desarrollo cognitivo en una etapa de transición
El desarrollo cognitivo en la adolescencia marca una etapa clave en la vida de los jóvenes, donde su forma de pensar cambia profundamente. Comienzan a razonar de manera más abstracta, a cuestionar el mundo que los rodea y a formar su propia visión de la realidad. Sin embargo, este avance intelectual convive con impulsos emocionales y una sensación de invulnerabilidad que puede llevar a decisiones arriesgadas. Comprender cómo piensan los adolescentes no solo ayuda a guiarlos con empatía, sino que también fortalece la comunicación y el acompañamiento en esta etapa tan compleja como valiosa.
Desarrollo social en la adolescencia 👧
Durante la adolescencia, el desarrollo social se vuelve fundamental en la construcción de la identidad del joven. En esta etapa, los adolescentes comienzan a experimentar cambios importantes en sus relaciones interpersonales, enfrentándose a nuevas formas de vincularse tanto con los adultos como con sus pares.
Como lo expresa Stefany García https://youtu.be/1v77t7S7xQU
¿te acuerdas de tu adolescencia? Esa etapa donde todo parecía confuso, donde los sentimientos estaban desbordados y todo se vivía con una intensidad única. Los amigos se convertían en tu refugio, eran quienes más te entendían, mientras que la relación con los padres podía volverse más distante o conflictiva.
La adolescencia es una etapa clave en el desarrollo humano. Es un periodo de transición entre la infancia y la adultez, en el que ocurren profundos cambios físicos, emocionales, cognitivos y sociales. Es una etapa de búsqueda: buscamos respuestas, nos cuestionamos, y queremos pertenecer. Nos preguntamos:
¿Quién soy? ¿Qué creo? ¿Qué quiero ser? ¿Dónde encajo?
Durante este proceso, comienzan a formarse distintas áreas de la identidad, y las relaciones que establecemos, tanto con adultos como con nuestros pares, juegan un papel crucial en esta construcción.
Socialización primaria y secundaria
La socialización primaria ocurre en el entorno familiar. Desde pequeños aprendemos valores, normas, creencias y formas de ver el mundo. En la adolescencia, esos aprendizajes se reevalúan. Comenzamos a cuestionar lo que nos han enseñado y, muchas veces, nos alejamos de esas ideas para encontrar otras con las que nos sintamos identificados.
Luego aparece la socialización secundaria, que se da en contextos más amplios como la escuela, las redes sociales, grupos deportivos, culturales o espirituales. En esta etapa, el adolescente se expone a nuevas experiencias y puntos de vista que enriquecen o desafían lo aprendido en casa. Esta fase es fundamental para la formación de la identidad vocacional, religiosa y sexual.
Identidad religiosa, vocacional y sexual
Durante la adolescencia, la identidad se va definiendo en distintos aspectos:
• Identidad religiosa: A menudo, la religión se hereda del entorno familiar. Sin embargo, muchos adolescentes comienzan a cuestionarla y buscan una espiritualidad que les represente auténticamente. Algunos optan por nuevas creencias, otros se alejan de la religión y algunos simplemente se toman el tiempo para explorar.
• Identidad vocacional: Surge el deseo de descubrir una vocación, una carrera o propósito de vida. La adolescencia es el momento de soñar, pero también de enfrentar las limitaciones sociales o económicas. Por eso es importante que existan espacios de orientación vocacional, acompañamiento docente y experiencias prácticas que permitan al adolescente conocerse mejor y tomar decisiones informadas.
• Identidad sexual: Es un componente clave del ser humano. Aquí se explora la orientación sexual, la identidad de género y la expresión del propio cuerpo. Este proceso, aunque natural, puede verse afectado si no hay un entorno de respeto, información clara y acompañamiento emocional. El rechazo familiar o social puede provocar inseguridad y afectar el bienestar psicológico del adolescente.
Relaciones con los adultos y con los padres
Las relaciones con adultos —como padres, docentes, líderes comunitarios o figuras de autoridad— pueden ser complejas. El adolescente necesita independencia, pero también orientación. Cuando se les escucha y se les guía con respeto, estas relaciones contribuyen positivamente a su desarrollo social, vocacional y afectivo.
Por otro lado, las relaciones con los pares se vuelven esenciales. Los amigos son el espacio de validación emocional. Con ellos se comparten dudas, creencias, experiencias, miedos y descubrimientos. Sentirse parte de un grupo fortalece la autoestima y ayuda a enfrentar momentos de rechazo o incomprensión en otros espacios, como el familiar.
Desarrollo emocional y moral en la adolescencia💖👀
La adolescencia es una etapa decisiva en la vida de cualquier persona. No solo ocurren cambios físicos evidentes, también se transforma la manera de sentir, pensar y relacionarse con el mundo. Durante este periodo, el desarrollo emocional y moral se vuelve especialmente importante, pues influye directamente en la construcción de la identidad personal y en la forma de convivir con los demás.
En el plano emocional, el adolescente empieza a experimentar sentimientos más complejos e intensos. Surgen la inseguridad, el miedo al rechazo, el enamoramiento, la frustración, la ansiedad, entre muchas otras emociones que pueden parecer desbordantes. Esto ocurre en parte por los cambios hormonales y cerebrales, pero también por las nuevas experiencias sociales y los desafíos personales. Aprender a identificar lo que se siente, expresarlo con claridad y manejarlo de forma adecuada no siempre es sencillo, y requiere orientación constante.
Aquí es donde el papel de los adultos resulta fundamental. Padres, docentes y otras figuras significativas deben ofrecer apoyo emocional desde la empatía y el respeto. Más que imponer reglas, necesitan escuchar, validar lo que el adolescente siente y enseñar con el ejemplo cómo afrontar situaciones difíciles. Un entorno comprensivo ayuda al joven a sentirse seguro y favorece su crecimiento emocional. Por otro lado, el desarrollo moral implica la capacidad de diferenciar entre lo correcto y lo incorrecto, y de actuar según valores propios. Durante esta etapa, los adolescentes comienzan a cuestionar lo que antes aceptaban sin discusión. Se preguntan por el sentido de las normas, por la justicia, la libertad, el respeto o la verdad. Este proceso de reflexión no es señal de rebeldía sin sentido, sino una búsqueda legítima de coherencia interna.
Desde la teoría, autores como Lawrence Kohlberg plantean que el juicio moral se transforma con la edad. El adolescente empieza a dejar atrás una moral basada solo en premios o castigos, y pasa a considerar principios más universales. Esto lo lleva a tomar decisiones más conscientes, a defender causas justas y a formar criterios propios.
Aquí es donde el papel de los adultos resulta fundamental. Padres, docentes y otras figuras significativas deben ofrecer apoyo emocional desde la empatía y el respeto. Más que imponer reglas, necesitan escuchar, validar lo que el adolescente siente y enseñar con el ejemplo cómo afrontar situaciones difíciles. Un entorno comprensivo ayuda al joven a sentirse seguro y favorece su crecimiento emocional. Por otro lado, el desarrollo moral implica la capacidad de diferenciar entre lo correcto y lo incorrecto, y de actuar según valores propios. Durante esta etapa, los adolescentes comienzan a cuestionar lo que antes aceptaban sin discusión. Se preguntan por el sentido de las normas, por la justicia, la libertad, el respeto o la verdad. Este proceso de reflexión no es señal de rebeldía sin sentido, sino una búsqueda legítima de coherencia interna.
Desde la teoría, autores como Lawrence Kohlberg plantean que el juicio moral se transforma con la edad. El adolescente empieza a dejar atrás una moral basada solo en premios o castigos, y pasa a considerar principios más universales. Esto lo lleva a tomar decisiones más conscientes, a defender causas justas y a formar criterios propios.
Factores de riesgo en la adolescencia
Durante este periodo, los jóvenes enfrentan diversos factores de riesgo que pueden afectar su desarrollo y bienestar.
Como comparte Melissa Padilla https://go.screenpal.com/watch/cTffIoniSjt, el uso excesivo de dispositivos electrónicos es una preocupación creciente. Los adolescentes pasan una cantidad significativa de tiempo frente a pantallas, lo que puede llevar a la adicción, aislamiento social y problemas de salud mental. Además, están expuestos a riesgos como el ciberacoso, el acceso a contenido inapropiado y la pérdida de privacidad.
Estudios recientes han mostrado que un uso intensivo de dispositivos puede perjudicar el rendimiento académico, especialmente en matemáticas, y debilitar habilidades como la atención, memoria y creatividad . Asimismo, se ha observado un aumento en los trastornos psiquiátricos en jóvenes desde el año 2000, con hospitalizaciones en ascenso, atribuido en parte al uso excesivo de tecnologías .
Estudios recientes han mostrado que un uso intensivo de dispositivos puede perjudicar el rendimiento académico, especialmente en matemáticas, y debilitar habilidades como la atención, memoria y creatividad . Asimismo, se ha observado un aumento en los trastornos psiquiátricos en jóvenes desde el año 2000, con hospitalizaciones en ascenso, atribuido en parte al uso excesivo de tecnologías .
Sin embargo, para enriquecer y mejorar el abordaje del tema, a continuación presento otros factores de riesgo importantes que no fueron tratados en el podcast, pero que también afectan seriamente a los adolescentes:
1. Uso y abuso de drogas
El consumo de sustancias psicoactivas, como alcohol, cigarrillos, marihuana y drogas sintéticas, representa un serio riesgo durante la adolescencia. Muchas veces, los adolescentes recurren a estas sustancias como forma de escape, por presión social o falta de orientación. El consumo temprano puede generar adicción, afectar el desarrollo del cerebro y provocar conductas de riesgo como accidentes o violencia.
2. Embarazo antes de los 16 años
El embarazo precoz puede truncar proyectos de vida, generar abandono escolar y traer consecuencias físicas, emocionales y sociales tanto para la madre adolescente como para el bebé. La falta de educación sexual, la ausencia de comunicación en el hogar y la desinformación son causas comunes. Es esencial promover una sexualidad responsable basada en el conocimiento, el respeto y el autocuidado.
Conclusión
La adolescencia es una etapa de grandes cambios emocionales, morales y sociales. Es un momento clave para formar la identidad y desarrollar valores. Por eso, es fundamental que los adolescentes reciban apoyo, comprensión y orientación adecuada.
Además, es importante estar atentos a los riesgos propios de esta etapa, como el uso excesivo de tecnología, el consumo de drogas y el embarazo precoz. Acompañarlos con respeto y ofrecer entornos seguros les permite crecer con mayor equilibrio y bienestar.
La adolescencia es una etapa de grandes cambios emocionales, morales y sociales. Es un momento clave para formar la identidad y desarrollar valores. Por eso, es fundamental que los adolescentes reciban apoyo, comprensión y orientación adecuada.
Además, es importante estar atentos a los riesgos propios de esta etapa, como el uso excesivo de tecnología, el consumo de drogas y el embarazo precoz. Acompañarlos con respeto y ofrecer entornos seguros les permite crecer con mayor equilibrio y bienestar.
Referencias
domingo, 18 de mayo de 2025
Explorando los Momentos de la Adultez: Cambios Evolutivos y Apoyo en el Ciclo Vital
El ciclo de vida humano está marcado por transiciones complejas y significativas, especialmente durante la adultez. Esta etapa, que se extiende desde la juventud hasta la vejez, está conformada por momentos evolutivos únicos que impactan el cuerpo, la mente y las relaciones sociales. A continuación, se exploran las características físicas, cognoscitivas y psicosociales de la adultez emergente y temprana, la adultez media y la adultez tardía. Además, se abordan el manejo de la muerte y el duelo, así como la importancia de las redes de apoyo primarias y secundarias.
Por Omaira Stella Guzmán Hernández
🌱Adultez Emergente y Temprana (aprox. 18-30 años): ¡Explorar, decidir y construir!
¿Qué ocurre en esta etapa?
Según Jeffrey Arnett (2000), esta es una etapa llamada "adultez emergente", marcada por la exploración de la identidad, la inestabilidad y la sensación de estar "en transición". Es el momento de elegir un camino profesional, establecer relaciones íntimas duraderas y ganar independencia.
Físicos: El cuerpo alcanza su punto máximo de funcionamiento. Las personas suelen gozar de buena salud, fuerza y resistencia. Sin embargo, es un momento en que pueden iniciarse hábitos perjudiciales (estrés, mala alimentación, consumo de sustancias).
- Se alcanza el pico máximo de salud, fuerza y resistencia física.
- La fertilidad está en su punto más alto.
- Aunque el cuerpo funciona eficientemente, hay tendencia a descuidar hábitos: alimentación inadecuada, estrés, falta de sueño o consumo de sustancias.
Cognoscitivos: Se fortalece el pensamiento abstracto, lógico y estratégico. Muchos jóvenes se enfrentan a decisiones importantes sobre la carrera, estudios, independencia económica y relaciones.
- Pensamiento postformal (Labouvie-Vief): los adultos jóvenes aprenden a manejar contradicciones, a ser flexibles y tomar decisiones en contextos ambiguos.
- Aumento de la inteligencia fluida (rapidez mental) y el desarrollo del juicio moral.
Psicosociales: Se buscan relaciones estables, la identidad personal y profesional, y se da el inicio de la vida afectiva adulta. Las experiencias sentimentales, el desarrollo de intimidad y la toma de decisiones sobre el futuro marcan esta etapa.
- Etapa de intimidad vs. aislamiento (Erikson): se busca crear lazos emocionales profundos, establecer una pareja o un grupo de amigos íntimos.
- Transición a roles de adulto: trabajador, pareja, padre/madre.
- El éxito en esta etapa fortalece el sentido de pertenencia y estabilidad emocional.
🌳Adultez Media (40 a 65 años): Reflexión, estabilidad y legado
¿Que define esta etapa?
La adultez media es una etapa de consolidación personal y profesional, pero también de reflexión. A menudo, surge la pregunta: “¿Estoy donde quiero estar?”. Se empieza a pensar en el legado que se dejará y a enfrentar cambios en la familia (como el "nido vacío").
Físicos: Comienzan cambios fisiológicos visibles como disminución de la agudeza visual, cambios hormonales, aumento de peso y menor energía. Es también una etapa crítica para prevenir enfermedades crónicas.
- Aparecen signos del envejecimiento: pérdida de masa muscular, aparición de canas, disminución de la vista o audición.
- Cambios hormonales: menopausia en mujeres y andropausia en hombres.
- Mayor riesgo de enfermedades crónicas (hipertensión, diabetes, colesterol alto).
Cognoscitivos: Aunque puede disminuir la velocidad de procesamiento, se incrementa la sabiduría práctica y el pensamiento estratégico. La experiencia se convierte en una herramienta poderosa para la toma de decisiones.
- La inteligencia cristalizada (sabiduría, experiencia acumulada) se mantiene o mejora.
- Disminución leve en la inteligencia fluida, pero compensada con estrategias prácticas.
- Capacidad para resolver problemas cotidianos y tomar decisiones complejas.
Psicosociales: Se da una revaloración del propósito de vida. Muchas personas atraviesan la "crisis de la mediana edad", reorientando prioridades personales y profesionales. También se enfrentan a retos como el síndrome del nido vacío o el cuidado de padres envejecidos.
- Generatividad vs. estancamiento (Erikson): el deseo de dejar huella, de cuidar y guiar a la siguiente generación.
- Posibles crisis: laboral, de pareja, existencial ("crisis de la mediana edad").
- Se reevalúan sueños, relaciones y propósitos.
- Importancia del equilibrio entre trabajo, familia y bienestar personal.
🍁Adultez Tardía (65 años en adelante)
¿Como se vive esta etapa?
Es una etapa que puede estar llena de satisfacción y sabiduría, pero también de pérdidas y desafíos. Se redefine la identidad al dejar atrás roles laborales o familiares activos, y se reflexiona sobre la vida vivida.
Físicos: Se intensifica el deterioro físico: disminuye la masa muscular, la densidad ósea y la movilidad. La salud requiere mayor atención, pero mantenerse activo física y mentalmente mejora la calidad de vida.
- Pérdida progresiva de fuerza, movilidad y agudeza sensorial.
- Mayor vulnerabilidad a enfermedades crónicas (artritis, Alzheimer, Parkinson).
- Necesidad de adaptaciones físicas y tecnológicas para mantener la autonomía.
Cognoscitivos: Puede haber declive en la memoria de corto plazo o en la rapidez mental, pero muchas personas conservan habilidades intelectuales valiosas. La experiencia de vida se convierte en sabiduría.
- Puede haber ralentización cognitiva (más lentitud para procesar información), pero muchas personas mantienen la claridad mental si se ejercita.
- Teoría de Baltes sobre la Sabiduría: las personas mayores desarrollan una mirada más global, empática y reflexiva sobre la vida.
Psicosociales: Se reflexiona sobre el legado, se busca sentido a la vida y se enfrentan pérdidas significativas (pareja, amigos, rol laboral). El aislamiento social puede aumentar, por lo que el acompañamiento emocional es clave.
- Integridad del yo vs. desesperanza (Erikson): revisión del pasado, aceptación de lo vivido, o arrepentimiento y frustración.
- Reestructuración de la red social: pérdida de amistades o pareja, y nuevas relaciones en centros comunitarios, familiares, etc.
- El sentido de utilidad puede mantenerse con actividades voluntarias, mentorías o cuidado de nietos.
⌛La Muerte y el Duelo: Una Realidad Inevitable, un Proceso Humano
La muerte, aunque inevitable, es un proceso profundamente humano que requiere comprensión y apoyo. Enfrentar el duelo implica aceptar la pérdida, experimentar el dolor emocional y adaptarse a una nueva realidad sin la persona fallecida. La forma de afrontarlo depende de factores como la edad, la red de apoyo, las creencias culturales y espirituales. Una atención psicológica adecuada puede facilitar este proceso, evitando duelos patológicos.
¿Cómo se enfrenta la muerte en la adultez?
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En la adultez media, se empieza a tomar conciencia de la propia mortalidad.
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En la adultez tardía, se enfrentan más de cerca las pérdidas de amigos, hermanos o pareja.
¿Qué es el duelo?
El duelo es el proceso psicológico y emocional que se experimenta tras una pérdida significativa, como la muerte de un ser querido, una ruptura o incluso un cambio drástico en la vida. Este proceso ha sido ampliamente estudiado por psicólogos y psiquiatras, y uno de los modelos más conocidos es el de Elisabeth Kübler-Ross.
-
Es la reacción emocional, física y social ante una pérdida significativa.
Teoría de Elisabeth Kübler-Ross (1969)
En su libro “Sobre la muerte y los moribundos”, la psiquiatra suizo-estadounidense Kübler-Ross propuso que las personas atraviesan cinco etapas del duelo:
Negación: "Esto no puede estar pasando". Es una reacción de choque que ayuda a amortiguar el dolor inicial.
Ira: "¿Por qué a mí?". Se manifiesta en frustración y enojo, a veces dirigido hacia otros o hacia uno mismo.
Negociación: "Si hago esto, quizás...". Se buscan soluciones mágicas para revertir la pérdida.
Depresión: Se toma conciencia real de la pérdida. Aparece tristeza profunda, aislamiento, melancolía.
Aceptación: Se asimila la pérdida. No significa estar “bien”, sino adaptarse a la nueva realidad.
🫂Redes de Apoyo Primarias y Secundarias: La Clave del Bienestar
¿Qué son las redes de apoyo?
Las redes de apoyo son los sistemas de personas o instituciones que brindan ayuda emocional, física, económica o social en momentos difíciles, como una enfermedad, una crisis emocional, una pérdida o cualquier desafío vital. Estas redes se dividen en primarias y secundarias, y ambas cumplen funciones fundamentales en el bienestar psicológico y social de las personas a lo largo de toda su vida.
Redes primarias:
La familia es el primer círculo de apoyo en la vida de una persona. Puede estar conformada por padres, hermanos, hijos, abuelos o cualquier otro miembro con quien se mantenga un vínculo afectivo fuerte. Su rol es fundamental en todas las etapas del desarrollo, pero especialmente en momentos de duelo, enfermedad o crisis emocional.
Funciones clave:
-
Brinda contención emocional.
-
Provee seguridad y cuidado en momentos de vulnerabilidad.
-
Fomenta la identidad y pertenencia.
-
Ayuda en la toma de decisiones y resolución de problemas.
-
Redes secundarias:
Los amigos cercanos, pareja y personas con quienes se tiene un lazo afectivo fuerte forman parte de esta red. Son fundamentales porque ofrecen apoyo desde la empatía, el entendimiento y la convivencia compartida.
Funciones clave:
-
Escuchan sin juzgar y permiten la expresión libre de emociones.
-
Ayudan a reducir el sentimiento de soledad.
-
Ofrecen consejos prácticos o compañía emocional en momentos críticos.
-
Pueden servir de mediadores en situaciones familiares o laborales difíciles.
-
Comunidad y entorno social (Red primaria y secundaria)
Incluye vecinos, líderes comunitarios, grupos religiosos, deportivos o culturales. Estas redes pueden no ser tan íntimas como la familia o los amigos, pero son fuentes de apoyo social cercanas que fortalecen el sentido de pertenencia e identidad colectiva.
Funciones clave:
- Fomentan la integración social y la participación.
- Ofrecen actividades que ayudan a mantener la mente activa.
- Promueven el acompañamiento solidario en procesos de duelo o crisis.
- Pueden actuar como redes de vigilancia y prevención (ej. vecinos atentos ante casos de violencia o enfermedad).
A lo largo de la adultez desde la etapa emergente hasta la tardía las personas atraviesan importantes transformaciones físicas, cognitivas y psicosociales que moldean su forma de vivir, relacionarse y enfrentar desafíos. Uno de los momentos más delicados es el duelo, una experiencia humana que requiere comprensión, tiempo y acompañamiento para sanar.
En este proceso, las redes de apoyo tanto primarias como la familia y los amigos, como secundarias a través de instituciones de salud y servicios sociales cumplen un papel esencial. Estas redes fortalecen el bienestar emocional, fomentan la resiliencia y nos recuerdan que no estamos solos.
Reconocer el valor de estas etapas, comprender nuestras emociones y apoyarnos en los demás es clave para construir una vida adulta más plena, empática y saludable.
Referencias
Desarrollo
Humano: Una Visión a lo Largo de la Vida, 8a Edición - 9781337554831 -
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examination of the convoy
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Adultez
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(2021, September 24). ¿Cómo llevar el duelo y sus etapas en adultos
mayores? CETYS
Trends. https://www.cetys.mx/trends/ciencia/como-llevar-el-duelo-y-sus-etapas-en-adultos-mayores/
De Las
Personas Adultas Mayores, I. N. (n.d.). Importancia de las redes de apoyo
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Universidad.
Semanario Universidad. https://semanariouniversidad.com/opinion/redes-de-apoyo-en-la-adultez-mayor/
martes, 13 de mayo de 2025
Las Primeras Etapas del Desarrollo Humano: Qué Saber y Cómo Acompañar 🍼👶🏻
Por Stefany Paola Garcia Beleño
El desarrollo humano en la primera infancia es fascinante y fundamental. Los primeros dos años de vida no solo marcan el inicio de habilidades como sentarse, caminar o hablar, sino que también sientan las bases emocionales, sociales y cognitivas que influirán a lo largo de la vida. Como padres, cuidadores o profesionales, comprender lo que sucede en estos meses es clave para brindar un acompañamiento consciente y amoroso.
👶 Del nacimiento a los 2 años: ¿Qué ocurre?
Durante este periodo, el desarrollo del bebé es rápido e intenso. La pediatra Diana Álvarez, conocida como Dra. Di, nos guía en varios de sus videos sobre cómo evoluciona el bebé y qué señales deben llamar nuestra atención:
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De 3 a 6 meses, los bebés empiezan a levantar la cabeza con firmeza, balbucean, se ríen y buscan el contacto social. Es un momento mágico para la conexión emocional.
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De 9 a 12 meses, ya pueden gatear, señalar objetos, aplaudir, y algunos incluso dan sus primeros pasos. También aparece la ansiedad por separación.
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De 0 a 12 meses, debemos estar atentos a signos de alerta como no fijar la mirada, no responder a sonidos o no sentarse sin ayuda.
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De 12 a 24 meses, el lenguaje empieza a florecer. Si a esta edad el niño no dice palabras simples, no camina o parece indiferente a su entorno, es importante consultar.
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🧠 Lo que dice la teoría del desarrollo
Para entender mejor estas etapas, podemos recurrir a algunas teorías clásicas de la psicología del desarrollo, que nos ayudan a ver más allá de lo físico:
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Bowlby y la Teoría del Apego: El vínculo con el cuidador principal (generalmente mamá o papá) es la base del desarrollo emocional. Un apego seguro da confianza al bebé para explorar el mundo.
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Piaget y el desarrollo cognitivo: En esta etapa, el niño se encuentra en la fase sensoriomotriz, donde explora el entorno con sus sentidos y movimientos, y poco a poco entiende que los objetos siguen existiendo aunque no los vea (permanencia del objeto).
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Vygotsky y el desarrollo social: El lenguaje y la interacción con adultos son claves. El bebé aprende a través de la imitación y del juego compartido.
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Erikson y el desarrollo psicosocial: En los primeros 18 meses, el gran desafío es desarrollar confianza vs. desconfianza. Si el bebé se siente seguro y atendido, podrá confiar en el mundo.
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🧠 Lo que dice la teoría del desarrollo
Para entender mejor estas etapas, podemos recurrir a algunas teorías clásicas de la psicología del desarrollo, que nos ayudan a ver más allá de lo físico:
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Bowlby y la Teoría del Apego: El vínculo con el cuidador principal (generalmente mamá o papá) es la base del desarrollo emocional. Un apego seguro da confianza al bebé para explorar el mundo.
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Piaget y el desarrollo cognitivo: En esta etapa, el niño se encuentra en la fase sensoriomotriz, donde explora el entorno con sus sentidos y movimientos, y poco a poco entiende que los objetos siguen existiendo aunque no los vea (permanencia del objeto).
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Vygotsky y el desarrollo social: El lenguaje y la interacción con adultos son claves. El bebé aprende a través de la imitación y del juego compartido.
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Erikson y el desarrollo psicosocial: En los primeros 18 meses, el gran desafío es desarrollar confianza vs. desconfianza. Si el bebé se siente seguro y atendido, podrá confiar en el mundo.
🎥 Ver video Freud y el desarrollo psicosexual
Freud ubicó esta etapa en la fase oral, donde el placer se centra en la boca (alimentación, succión, etc.). Esta etapa es fundamental para la construcción de la seguridad emocional, ya que el vínculo con la madre o cuidador se expresa a través de la alimentación y el afecto.
🎥 Ver videoKohlberg y el desarrollo moral
Aunque su teoría se enfoca en edades posteriores, Kohlberg sostiene que las bases de la moralidad empiezan a formarse en la primera infancia, a través del modelado. Cuando el bebé observa actitudes como el cuidado, la paciencia o la empatía, internaliza gradualmente nociones básicas de lo que está bien o mal.
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🧩 ¿Y si algo no va bien?
No todos los niños se desarrollan igual. Algunos van más rápido, otros toman su tiempo. Lo importante es observar, acompañar y, si es necesario, consultar a un especialista. Los libros de Pérez (2012) y Stassen (2016), dos referentes en psicología del desarrollo, coinciden en que una intervención temprana es clave para ayudar al niño a alcanzar su máximo potencial.
Conclusión
Los primeros dos años de vida son una etapa de descubrimientos, aprendizajes y vínculos. Estar informados y atentos no significa alarmarse ante cada diferencia, sino tener herramientas para acompañar mejor. Como adultos, somos guías y referentes en este maravilloso viaje del desarrollo humano.
Referencias
Álvarez, Diana. [Dra. Di pediatra] (2022). Desarrollo del bebé de 3 a los 6 meses [video youtube]. https://youtu.be/5wWZY_5JRkI?t=5
Álvarez, Diana. [Dra. Di pediatra] (2022). Desarrollo 9 a 12 meses [video youtube].
https://youtu.be/nBTvUlHLFTU?t=2
Álvarez, Diana. [Dra. Di pediatra] (2023). Todos los s ignos de alerta en el desarrollo del bebé del bebé de los 0 a los 12 meses [video youtube]. https://youtu.be/ozFWqX5l9jQ?t=5
Álvarez, Diana. [Dra. Di pediatra] (2023). Signos de alerta de los 12 a los 24 meses [video youtube]. https://youtu.be/1LZXyABEKa0?t=25
Pérez, N. (2012). Psicología del desarrollo humano: del nacimiento a la vejez . ECU. https://elibro-net.bibliotecavirtual.unad.edu.co/es/ereader/unad/62378?page=13
Sprouts en español (2020). Teoría del Apego Bolwby . [video youtube]. https://youtu.be/olnzuMtZdA8
Sprouts en español (2020). Teoría del Desarrollo cognitivo Piaget. [video youtube].https://youtu.be/yYFhPO5pArc
Sprouts en español (2021). Teoría del Desarrollo Social Vigotsky . [video youtube]. https://youtu.be/fHdQWmbhfdE
Sprouts en español (2021). Teoría Psicosocial Erikson. [video youtube]. https://youtu.be/C8TBqpu4T2I
Sprouts en español (2021). Teoría del Desarrollo Moral: Golberg . [video youtube]. https://youtu.be/eWoP3OHqzF8
Sprouts en español (2022). Teoría del Desarrollo psicosexual de Freud . [video youtube]. https://youtu.be/OVDr31_rWqw
Stassen, K. (2016). Psicología del Desarrollo: Infancia y Adolescencia . Editorial Médica Panamericana. http://www.medicapanamericana.com.bibliotecavirtual.unad.edu.co/visorebookv2/ebook/9788498359824
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